En un fallo judicial que convalidó la interferencia del poder judicial en las dinámicas de la política, en la tarde del pasado martes la dos veces ex presidenta de las y los argentinos, Cristina Fernández de Kirchner fue condenada a seis años de prisión e inhabilitada para ejercer cargos públicos de por vida, en un año electoral en el que se presentaría como candidata.

 

Desde La Lucha en la Calle Agmer no podemos menos que elevar una voz de denuncia ante lo que consideramos una resolución viciada, tomada por una Corte Suprema de Justicia tendenciosa de manera ya harto comprobado.

 

Hacemos nuestras las palabras de Abuelas de Plaza de Mayo cuando en su comunicado dicen que “cuando la justicia se utiliza para distorsionar de forma tan brutal el tablero político, la democracia está en peligro”; y nos sumamos a las voces de centrales sindicales como la CTA y ATE, quienes repudiaron esta definición y, enérgica y claramente, denuncian una violación al sistema democrático, lo que es algo que de ningún modo podemos avalar.

 

Sabemos que no es nueva esta forma de actuar de la Justicia, que puso en funcionamiento para este caso toda la celeridad que le reclamamos hace décadas en causas populares y de lesa humanidad que siguen juntando telas de araña en sus cajones.

 

Hacemos nuestras palabras que se han replicado en estos días: NO PODEMOS TENER UNA DEMOCRACIA SANA SI LA DIVISIÓN DE PODERES SE DESDIBUJA.

 

#LaLuchaEnLaCalle